Un ataque cerebrovascular ocurre cuando el flujo de sangre a una parte del cerebro se detiene, en este tiempo el cerebro no recibe nutrientes y el oxígeno necesario para su funcionamiento, causando la muerte de las células cerebrales (neuronas) y ocasionado un daño permanente si no se atiende de forma oportuna.
Hay dos tipos de ataque cerebrovascular:
Ataque cerebrovascular isquémico: ocurre cuando un vaso sanguíneo que irriga sangre al cerebro resulta bloqueado por un coágulo o trombo de sangre. Esto puede suceder de dos formas.
•Se forma un coágulo en una arteria que ya está muy estrecha.
•Un coágulo se desprende de los vasos sanguíneos del cerebro o de alguna parte en el cuerpo (la mayoría de las veces del corazón) y se traslada hasta el cerebro.
Para tratar el ACV isquémico se cuenta con un lapso de 4.5 horas a partir de que una persona inicia síntomas, esta maniobra se llama ventana terapéutica, donde se realiza una trombólisis intravenosa, la cual permite detener y minimizar las reacciones que conducen a la muerte neuronal. Por eso es muy importante acudir inmediatamente a un centro de Urgencias de alta complejidad para procurar realizar el procedimiento lo más pronto posible.
Ataque cerebrovascular hemorrágico: sucede cuando un vaso sanguíneo de una parte del cerebro se debilita y se rompe, provocando que la sangre se escape hacia el cerebro. Algunas personas tienen defectos en los vasos sanguíneos haciendo que esto sea más probable.
Estos ACV también pueden ocurrir por una presión arterial muy alta generando que los vasos sanguíneos se revienten, ocasionando un accidente cerebrovascular hemorrágico.
¿Sabes qué significa CORRE?
Desde la sociedad colombiana de neurología se concertó el nuevo acrónimo: CORRE, para la detección temprana de un ACV, de esta manera las personas pueden recordar más fácil cuándo pueden estar sufriendo o presenciando un ataque cerebrovascular.
Cara torcida
Ojo, alteración en la visión
Rápida debilidad en un brazo o pierna
Raro al hablar
Emergencias, llamar al 123
¿Se puede prevenir un ACV?
En el ACV hay factores de riesgo prevenibles y no prevenibles.
Riesgos prevenibles (acciones que puedes realizar para evitar un ACV): actividad física, alimentación saludable, control adecuado de las comorbilidades como presión arterial, colesterol y diabetes; y limitar el consumo de tabaco.
Riesgos no prevenibles: El tipo de raza, como orientales y afrodescendientes, edad, los mayores de 65 años son más propensos a sufrir un ACV y algunos tipos de ataque cerebrovasculares pueden afectar más a las mujeres.
Es importante resaltar que los ataques cerebrovasculares pueden ocurrir a cualquier edad y que es la primera causa de discapacidad en el mundo y en Colombia está entre las primeras cinco causas de muerte. Por eso desde la Clínica Somer te invitamos a actuar a tiempo frente a la aparición de algún síntoma.